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“Asertividad, entre la pasividad y la agresividad”


¿Cuántas veces se han encontrado en la siguiente situación?: Se encuentran con un amigo o amiga y este hace algo que te molesta, obviamente tú quieres que pare, pero no quieres verte muy agresivo como el típico gruñón aguafiestas, pero… por el otro lado en verdad te molesta lo que está haciendo y temes que, al actuar así de pasivo, así de “buena onda” le estás concediendo el derecho de que siga haciéndote aquello que tanto te molesta. ¿Hay alguna forma de hacer que pare sin inclinarte por ninguno de estos dos extremos que son la agresividad y la pasividad?, Si, la hay y se llama asertividad.

¿Pero entonces qué es la asertividad?, es un modelo de relación interpersonal que consiste en conocer los propios derechos y defenderlos a su vez respetando a los demás. Básicamente la asertividad es decir de manera clara, directa y concisa que es lo que tú quieres, tratando en la medida de lo posible de respetar a los demás.

Veamos un par de ejemplos:

Tienes una presentación oral mañana así que vas con tu profesor a checar como lo haces para recibir correcciones y estar preparado para mañana, llegas con el maestro, recitas tu presentación y esperas su opinión, él no de la mejor manera empieza a criticar duramente tu desempeño. ¿Cuál es tu forma de reaccionar?

Si reaccionaras de forma agresiva, tu respuesta sería ponerte en modo de ataque instantáneamente sin pensar bien que su crítica dura en realidad va a ayudarte a mejorar, probablemente te le pondrías “al tiro” al profesor y le faltarías al respeto, harías uno que otro berrinche, además ser grosero y finalmente saldrías de su aula muy enojado.

Ahora bien, si reaccionaras de forma pasiva probablemente bajarías la mirada, te encogerías de hombros y multiplicarías por mil la magnitud de su crítica perdiendo así mucha de la confianza que tenías en ti mismo cuando en realidad lo que te corrigió el profesor no es mas que con la finalidad de que a la mera hora lo hagas de lo mejor.

Finalmente, si reaccionaras de manera asertiva probablemente mantendrías la calma a pesar del mal manejo de la crítica de tu profesor y le dirías algo como “Háblame más sobre aquello que no te ha gustado y ayúdame a corregirlo” Al decirle esto le sacas provecho de verdad a la crítica de tu profesor ya que corriges tus errores sin hacerte menos como persona y sin dejar que el mal manejo del profesor te haga caer en un juego de agresiones, Oh y adivina qué, al día siguiente te fue de maravilla en tu presentación.


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